Inquieto, innovador, visionario, Gyula Kosice fue un creador clave en la escena artística argentina desde que hizo su irrupción en ella a mediados de los años cuarenta. Fundador del Movimiento Madí, creador de esculturas articuladas, lumínicas, cinéticas e hidrocinéticas, promotor del arte argentino en el exterior y arquitecto de la inigualable Ciudad Hidroespacial, su labor experimental y pionera dejó una marca indeleble en la historia de nuestro arte.
A pocos meses de su desaparición física, el Museo Nacional de Bellas Artes organiza una sucinta muestra en su homenaje, con el fin de recordar algunos de los mejores momentos de su carrera y destacar sus aportaciones y valores.
La exposición incluye algunas piezas destacadas de diferentes períodos de su producción. Comienza con su famosa escultura articulada Röyi (1944), sus pinturas de marco recortado y una obra de gas neón, características de los primeros años Madí. Un conjunto de esculturas posteriores pone de manifiesto su interés por el movimiento, los desplazamientos y la luz, e introduce el agua, el material que se transformó prácticamente en su marca de autor. Maquetas y bocetos ofrecen una rápida aproximación a su Ciudad Hidroespacial. Y algunas obras recientes evidencian su pasión inclaudicable por la experimentación y la investigación tecnológica.
Con esta exhibición, el Museo Nacional de Bellas Artes rinde el merecido reconocimiento a uno de los artistas más singulares del arte local, a pocos meses de su desaparición física y a 25 años de su última gran retrospectiva en el Museo.
La exposición, que está integrada por obras del Museo Kosice, museos públicos —Museo Nacional de Bellas Artes, Museo Castagnino+macro y Museo de Artes Plásticas “Eduardo Sívori”— y colecciones particulares, fue curada por Rodrigo Alonso e incluye piezas destacadas de diferentes períodos de la producción como la escultura articulada Röyi (1944), pinturas de marco recortado y una obra de gas neón, características de los primeros años Madí. Un conjunto de esculturas posteriores pone de manifiesto su interés por el movimiento, los desplazamientos y la luz, e introduce el agua, el material que se transformó en su marca de autor. Maquetas y bocetos ofrecen una rápida aproximación a la Ciudad Hidroespacial, uno de sus proyectos más complejos y ambiciosos. Obras más recientes evidencian su renovada pasión por la experimentación y la investigación tecnológica.