Qué recordar? ¿Cómo recordar? La respuesta a estas preguntas me lleva a los ejes fundantes de mi obra: memoria, recuerdo, olvido, dolor. Mi intención es construir una memoria personal a partir de la apropiación de imágenes simbólicas del pasado–Holocausto, guerras, genocidios-, recontextualizándolas.
Hay objetos, en nuestras vidas, en los que se “graban” nuestras huellas, a los que les damos forma según el uso que les damos y que operan como una especie de testimonio, de recuerdo viviente. Dichos objetos –vestimenta- “hablan” de ausencia, de presencia, remiten a historias personales y colectivas y a cómo formaron parte de los registros de la historia. La elección de los materiales y técnicas a lo largo de mi trayectoria tiene que ver con dotar de presencia a estos objetos inertes que denotan ausencia, restituyéndoles la vida –zapatos de Látex en
“Abandono Restitución”, sacos de caucho en “Empty Traces”-.
En otras obras, tales como “Union Square Wall” –en alusión al Muro de los Lamentos-, mediante un site specific, realizo una transpolación de un lugar de memoria sagrada a un contexto urbano, disparando nuevos significados.
Mi idea es crear una narrativa personal en la trama de la memoria colectiva, como una escritura, en la cual las imágenes icónicas son dotadas de un nuevo sentido. La historia de la expoliación, de lo que nos fue arrebatado, es restituida al espectador. Mi trabajo constituye una obra abierta que apela a la mirada del espectador para ser completada, para adquirir su sentido definitivo. Si bien el referente histórico es poderoso, es una obra que remite al presente y al futuro.
En esta obra en particular que presento aquí –“Lazos de Sangre”- si bien el foco está puesto en el dolor y el sufrimiento, también lo está en la posibilidad de restitución de la vida, mediante la circulación y renovación de sangre, en donde las bolsas de transfusión operan como receptáculos de la memoria personal y genética, las que al multiplicarse mediante un patrón repetitivo también devienen memoria colectiva, ya que la historia se repite cíclicamente.
Liana Strasberg